POLÍTICA Y GASTRONOMÍA
Hace una semana, mientras disciplinados militantes del Movimiento Nacional deliberaban sin rumbo en el segundo piso del Centro de Convenciones Gonzalo Jiménez de Quesada ("70 oradores y ninguna decisión", tituló Cromos su informe al respecto), un piso abajo ocurría otro acontecimiento, tan oloroso como una reunión política, pero ese último, desde luego, saturado de fragancias nobles y exquisitas. Se trataba, en efecto, del tercer concurso culinario "Tocado de oro" 1987, principal certamen gastronómico del país, organizado lujosamente por la firma Nestlé de Colombia. Jurado del mismo fuimos Lácydes Moreno Blanco -quien actuó como presidente-, los expertos Sonia de Navas, Inés Hurtado de Salgar, Claude Lemaire, Gastón de Bedout, Augusto de Pombo Pareja, y este tragón voraz. El concurso, en efecto, consistía en elegir entre nueve chefs finalistas, procedentes de distintas regiones del país, al número uno de la cocina colombiana. Se calificaba no solo la calidad del pl